Comparta
la alimentación de la familia, para fortalecer hábitos alimentarios, valores ,
comportamientos y la unidad familiar.
Comer constituye uno de los grandes
placeres de la vida. La reunión alrededor de la comida ofrece un momento
propicio para el encuentro de la familia y para compartir los sucesos
cotidianos.
La vinculación de la mujer a la fuerza
laboral, la institucionalización de los niños a temprana edad, las grandes
distancias para ir al trabajo, la oferta creciente de comidas rápidas entre
otras situaciones, hacen cada día más difícil compartir en familia en las horas
de las comidas. Como consecuencia, la familia se dispersa y se debilita la
unidad familiar.
Propiciemos el encuentro familiar alrededor
de la comida por lo menos una vez al día entre semana y con mayor frecuencia
los días de descanso y los festivos.
Aliméntese
bien y controle su peso con frecuencia para proteger su salud.
Comer en
exceso y llevar una vida sedentaria, puede conducir a alteraciones en el
organismo como altos niveles de colesterol, de ácido úrico, de triglicéridos en
la sangre y causar enfermedades como
hipertensión arterial, sobrepeso, obesidad, diabetes y algunos tipos de cáncer.
Seleccionar alimentos bajos en grasa.
Comer más frutas y verduras sin agregado
de azúcares ni sal
Comer varias veces en lugar de una comida
grande; comer despacio y masticar bien
Hacer
deporte por lo menos tres veces a la semana ayuda a mantener la mente, el
corazón y el cuerpo sanos.
Mantener el cuerpo en forma y físicamente
activo, permite que el organismo funcione debidamente y contribuye a que las
personas obtengan el máximo provecho de
los alimentos que comen.
El ejercicio debe realizarse
periódicamente. Media hora de ejercicio tres veces en la semana es un objetivo
razonable.